Situados en Landete, provincia de Cuenca en un punto intermedio entre tres provincias: Valencia, Cuenca y Teruel, a 1100 metros de altitud en el punto más alto.
La finca cuenta con un total de 120 hectáreas y en medio de ellas se encuentra la bodega.
La filosofía de ALTOLANDON es hacer vinos de calidad y por tanto uvas de calidad, por ello cuidamos al máximo todo lo que tiene que ver con el viñedo desde el momento de su plantación, al elegir las variedades, los pies y los clones más adecuados para nuestro clima y cada tipo de suelo.
Las tierras altas reúnen las condiciones ideales para una producción de gran calidad, les confieren a los vinos unas características únicas y especiales en el mundo. El vino nace de la uva, pero la altitud en la que se desarrolla y el terruño de donde proviene resultan fundamentales para el resultado final.
A mayor altura, más y mejor radiación solar y así la amplitud térmica es mayor.
A mas altura, mas taninos. La altura aporta un efecto refrescante que incrementa los índices de acidez gracias a la amplitud térmica. Acumulación de aromas y sabores.
Estas condiciones climáticas hacen que durante los últimos meses del periodo de gestación de la uva, esta haga una maduración lenta y prolongada. Así salen granos más sufridos, pequeños y con mayor proporción de hollejos que de pulpa, caso fundamental para los tintos ya que en el hollejo se encuentran los taninos. Los vinos provenientes de estas uvas ofrecen gran variedad de color, amplitud y profundidad de aromas y gran complejidad en boca, además se convierten en mucho más aptos para la crianza en barricas, ya que a mayor acidez y proporción de taninos, mayor es la posibilidad de obtener vinos de guarda.