La filosofía de todas las generaciones ha estado y continúa siendo un entender el vino y la viña como una manera de vivir. Una manera que transmite respeto y admiración por nuestro entorno único y excepcional.
De alguna manera, la filosofía de JANÉ VENTURA en la hora de crear los vinos y cavas, está inspirada en el respeto hacia el entorno y la tradición, y el discurso de la bodega intenta englobar conceptos tan intangibles como la cultura, el paisaje y la creatividad, difíciles de valorar pero que son presentes en el alma de sus vinos.