Un lugar muy especial que está impregnado de todo el esfuerzo y las ilusiones de un gran proyecto que es a la vez un sueño.
Construida para garantizar las condiciones idóneas en la crianza y maduración de los vinos, tradición y nuevas tecnologías se dan la mano para conseguir un resultado excepcional.
La instalación cuenta en su nave de elaboración con 6 tanques de 50.000 litros y 3 tanques de 25.000 litros.
La nave de crianza posee en la actualidad un parque de barricas de roble francés y americano de tostado medio que roza las 1000 unidades.
La sala de catas, estancia donde el diseño es el auténtico protagonista, contrasta con el resto de ambientes clásicos que componen la instalación. La bodega cuenta con dos salones comedor y las correspondientes zonas de trabajo y oficinas.