La historia de nuestra empresa se inicia en 1970 cuando Luis Marín Díez fundó en Leioa (Bizkaia) la bodega, que lleva su nombre, destinada al embotellado y distribución de vinos. Sin embargo, esta iniciativa responde a una tradición que se remonta años atrás y que ha pasado de padres a hijos durante varias generaciones. El cultivo de la vid y la elaboración de buenos caldos han sido una constante en la saga familiar tanto en nuestra línea materna como paterna. Procedentes todos ellos de Fuenmayor, La Rioja, y ligados a la vitivinicultura, han sabido transmitir sus conocimientos y buen hacer que quedan plasmados en los vinos que actualmente producimos.
En 1991 Luis Marín construyó una segunda bodega en el corazón de La Rioja, en el término La Asomante, de quién toma su nombre, a medio camino entre Fuenmayor y Logroño. Esta bodega puso el colofón a años de esfuerzo y sacrificio dedicados al mundo del vino. En la actualidad es allí donde envejecen nuestros caldos. Frente a las grandes empresas vinícolas que proliferan actualmente en nuestro entorno, nosotros apostamos por una pequeña producción y una elaboración cuidada y artesana.
Con la tradición y la calidad como cartas de presentación queremos hacer participes a todos los amantes del vino de nuestros productos para que disfruten con ellos de los aromas y sabores que el cariño y la dedicación de nuestra empresa familiar ha depositado en ellos.