A finales de los años 80, el Valle de Secastilla comenzó a olvidar paulatinamente una tradición milenaria, a medida que sus gentes migraban a las ciudades. Con el comienzo del nuevo siglo, una nueva generación dispuesta a dejar huella, decide rescatar 15Ha de viñedo heredado, algunos de ellos con una antigüedad casi centenaria. Es así como nace Bodegas Obergo, narrando las historias de los viejos viñedos.