En algo más de 40 años, Viña Magaña se ha convertido en un claro referente de la Denominación Origen. A lo largo de este tiempo, la bodega ha concentrado 60 hectáreas de viñedo propio y un parque de barricas de 700 unidades. La elaboración se realiza en el interior de un edificio firmado por el arquitecto navarro, Rafael Moneo. A la belleza de su diseño se une la más avanzada tecnología, la vinificación por separado de cada varietal, la utilización de levaduras naturales, junto a ciertas prácticas artesanales, que permiten la selección de las mejores uvas o la maceración con el hollejo durante al menos una semana. Sus marcas están presentes en más de treinta países. Vocación internacional que encuentra fiel reflejo en las variedades cultivadas: Merlot (60%) y Cabernet Sauvignon (30%). El abanico varietal se completa con otras foráneas como la Syrah, junto a la nacional Tempranillo.