Nos encontramos en Esclanyà, un pequeño núcleo ubicado al sud de Begur y que posee una gran historia; conserva elementos propios de distintas épocas del románico y tradicionalmente su economía se ha fundamentado en el cultivo de viñedos y olivos.
Habitualmente, en las casas de campo, se realizaban distintas labores y en el caso concreto del Mas Nou, la finca donde elaboramos nuestros vinos, fue en 2013 cuando se inició la plantación de cepas de variedades concretas para sustituir los híbridos existentes a lo largo de las 3 hectáreas.
Al 2016, Joan Carbó puso en práctica la idea de volver al sector primario con la creación de una bodega, y un año más tarde, su hijo Pau, junto al resto de la familia han ido desarrollando este proyecto. Todos trabajan a fin de conseguir trasladar el fruto de los viñedos hasta las botellas para poder disfrutarlo.