Lagravera nace de la ilusión para recuperar las tradiciones. Partiendo de un entorno difícil, con una climatología de extremos, Lagravera vio la luz como proyecto de recuperación de un terreno y de las tradiciones.
Desde el principio la agricultura ecológica se impuso como la mejor forma de trabajar esta primera viña, viña Nuria. Así, desde el primer momento Lagravera obtuvo el certificado del Consejo Catalán de la Producción Agraria Ecológica-CCPAE.
Viña Nuria cuenta con 11,48 hectáreas que se dividieron en 14 parcelas. Las plantas se han adaptado perfectamente al terreno pedregoso y han sabido sacar lo mejor de estos suelos dando una personalidad única y mineral a nuestros vinos.
Los buenos resultados hicimos evolucionar Lagravera hacia la agricultura biodinámica, la tierra ofrece aquello que le damos.