Situada en el noroeste de España, entre La Rioja y Burdeos, se encuentra la impresionante Propiedad de Arínzano, un espacio protegido que constituye un rico hábitat natural.
La entrada a la bodega, diseñada por el famoso arquitecto español Rafael Moneo, sirve de inspiración para una nueva identidad de marca de la finca Arínzano.