Bodega fundada por Pedro Aragón Morales, nacido en 1815. Continuando con la tradición familiar abre un pequeño lagar y bodega en el Callejón de Jerez, vendiendo su producción en las pequeñas tabernas de Chiclana y directamente al público en la misma bodega, a los jornaleros que pasaban por el Callejón de Jerez hacia las viñas cercanas. Su hijo, Juan Aragón Ramos, hereda el lagar y parte de la solera, la amplía sin modificar la misma estructura del negocio, que sigue con su venta local.
Tiene que pasar una generación más, Juan Aragón Saucedo,y llegar a Diego Aragón Periñán, nacido en 1896 cuando con la ayuda de sus 10 hijos le da un gran empuje a la bodega comprando una finca en la calle Olivo, próxima a donde sus antepasados empezaron, y más cantidad de viñas.